Navidad, Reyes, amigos invisibles… En estas fechas hay muchos regalos por hacer y en muchas ocasiones se nos acaban las ideas. Un vino es un regalo perfecto, el rango de precios es muy grande por lo que cada uno puede gastarse lo que le apetezca manteniendo una buena calidad.
Siempre hay que tener en mente los gustos de la persona a quien regalamos ¿Cuáles son sus sabores favoritos? Si le gustan los sabores fuertes e intensos acertarás con un Cabernet Sauvignon. Si por el contrario es una persona golosa sería una elección más acertada un Riesling o un espumoso.
Podemos optar por regalarle algo diferente cómo un vino ecológico o si le gusta viajar un vino del país en que haya estado seguro que le traerá buenos recuerdos. Si por el contrario está lejos de su tierra un vino de su procedencia es un guiño que le gustará.
Un vino diferente es un acierto para los más atrevidos, seguro que sabrá apreciar el descubrimiento de algo nuevo y sorprendente.
Un caldo con Denominación de Origen siempre es una garantía de valor y prestigio. Si es un amante del vino un clásico como Rioja o Ribera del Duero es la clave.
Vinos para todos los gustos y personalidades. Si el regalo fuera para vosotros ¿Con que os gustaría que os sorprendieran?
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